El hojaldre es una de las creaciones más versátiles de la gastronomía que puede aplicarse tanto a la pastelería como a la cocina. Su preparación consiste en intercalar una capa de masa con otra de materia grasa para lograr una textura crujiente y a la vez suave. Martha Stewart destaca que al morder un buen hojaldre, este debe desgranarse.
Para preparar la masa se necesitan:
- 1 kilo de harina
- ½ litro de agua
- 20 gramos de sal
- 900 grs. de mantequilla
El primer consejo de Martha es trabajar en un ambiente fresco para que la masa no se seque. Sobre la mesada de la cocina se debe ubicar la harina y formar un agujero, como si se tratara de un volcán. A continuación se debe verter el agua, la sal y la mantequilla fundida, e ir incorporando poco a poco la harina hasta formar una bola compacta.
El próximo paso es marcar una cruz profunda en el centro de la bola. Según Martha, esto ayudará a que la masa leve un poco antes de llevarla a refrigerador durante 2 horas. Transcurrido este tiempo, se debe extender la masa sobre la mesada con un rodillo, usando los cortes anteriores como guía para formar una cruz.
Seguidamente, se debe volcar la mantequilla a temperatura ambiente en el centro de la cruz y formar un pequeño paquete, tapándola con los lados de la cruz hasta que se forme un rectángulo perfecto. A continuación, se deben dar pequeños golpecitos a la masa con el rodillo para luego pasar a extender la masa en una única dirección hasta conseguir una placa de forma rectangular. El último paso es dejarla enfriar nuevamente en el refrigerador por 30 minutos.
Otros trucos que recomienda Martha Stewart para lograr una masa perfecta, incluyen:
- Utilizar siempre ingredientes de calidad.
- Al cocinarla, meter la masa bien fría en el horno muy caliente para que quede suave y esponjosa.
- Si se deja la masa reposando, cubrirlo con papel film para que no se seque.
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