Si has tenido oportunidad de ver alguna de las versiones de la película El Gran Gatsby, basada en la novela del mismo nombre del escritor americano Scott Fitzgerald, seguramente hayas quedado encandilada con los sofisticados ambientes de lujo que sirven de escenario para la historia. Y es que este estilo es considerado uno de los más destacados de los años ‘20.
Basado en la opulencia y el glamour, este tipo de decoración puede incorporarse en pequeños detalles que le agreguen clase a un ambiente. El secreto radica en no exagerar. He aquí, los principales puntos a tener en cuenta para sumarse a este estilo:
Para empezar, es importante darle a la iluminación el espacio que se merece. Y es que tanto las lámparas de techo, las de mesa o las de pie hechas en cristal son características de la elegancia que identifica a esta década. También se les puede agregar pantallas de tela con los flecos de la vestimenta que utilizaban las mujeres de la época. Otro elemento típico son las lámparas Tiffany, compuestas de pequeños cristales de colores.
En lo que se refiere a las tonalidades, la decoración de los años 20 suele tener como protagonistas al dorado y al plateado. Ambos son excelentes para evocar el lujo de una época próspera como pocas. Pero además, se puede incorporar la paleta de las maderas oscuras y sobre todo, el negro.
Para los muebles, se debe optar por materiales como el terciopelo y el metal tanto en sillones, sillas de comedor, mesas auxiliares, puertas de armarios y adornos. Por último, nunca estará de más sumar estampados y empapelados con líneas rectas y figuras geométricas, ¡tal como se pueden apreciar en la película!
¿Te animas a incorporar estos detalles de lujo a tu hogar?
