Humo Estudio: accesorios cancheros y zero waste
Diseños de mochilas, carteras y billeteras sustentables, sin costura y con estilo. Conocé quiénes están detrás de este proyecto práctico y estiloso con 50.000 seguidores en redes.
Un buen accesorio sube el nivel de cualquier outfit. Por eso, reivindicamos a Humo Estudio, una marca argentina que confecciona objetos de uso cotidiano. Lo que los hace únicos es que además de fabricarlos plegando material plástico, son zero waste. Es decir que reutilizan y reciclan los residuos sin desechar nada al producir.
Desde Más Chic conversamos con Estanislao Canteros, uno de los creadores de esta firma junto a Aixa Frankie. Descubrí todos los secretos detrás de este emprendimiento que la rompe.
¿Cuál es el concepto de Humo Estudio?
Es una marca de accesorios y muebles. Originalmente teníamos otra cosa en mente, pero al experimentar con distintos materiales llegamos al que usamos actualmente. Y aparecieron las mochilas, el primer producto que lanzamos a la venta. Tuvimos un buen feedback y nos dimos cuenta que había mucho potencial en el formato y en el concepto de diseño. Nos empezó a demandar más tiempo en el desarrollo de diseños nuevos, de productos, de logística. Así fue como nos decidimos y nos convertimos de ser un estudio de diseño a ser una marca que vende productos y objetos.
¿Cómo describirías los accesorios?
Nuestros productos están hechos de material plástico, un elaborado que desarrollamos para poder cumplir con las cualidades estéticas, técnicas y funcionales con las que pensamos nuestros objetos. Parte todo de una pieza plana que luego es plegada. En el diseño es muy importante la atención a los detalles. Desde que coincidan los remaches para el ensamblado, que se mantengan parados en equilibrio, o que ahorren la mayor cantidad de material en el corte. Todos estos puntos son los que terminan haciendo nuestro distintivo.
Los confeccionan con plástico.
Sí. Este material tiene sus pros y sus contras. Una de las desventajas es que no se puede coser porque se quiebra con el uso y el paso del tiempo. Por eso, nuestros accesorios no tienen costuras. Esto brinda una diferencia estética en relación con otros accesorios, como pueden ser los de marroquinería fabricados con cuero. Además, es un material interesante. Entre sus ventajas encontramos, por ejemplo, que es impermeable, súper resistente y mantiene su robustez, o sea, tiene una buena estructura y se mantiene rígido.
¿Cómo hacen para ser un emprendimiento zero waste?
Desde el inicio, la idea fue generar el menor impacto ambiental posible. Al trabajar con plástico pensamos cómo aprovechar el desperdicio, reciclándolo y reutilizándolo. Así decidimos usar los restos en pequeños accesorios como aros, billeteras o porta anteojos. No desperdiciamos absolutamente nada de la materia prima que usamos en nuestro proyecto porque los residuos que sobran al cortar todos los moldes de los productos, se trituran y funden para usar en otros diseños.
¿Así surgió su otra marca, Hollín?
Claro. En Hollín trituramos los desechos con la máquina y eso lo mezclamos con cemento y otros aditivos para poder hacer muebles. Es un proceso que nos llevó bastante tiempo de desarrollo, pero nos gusta mucho el concepto. Lo que se descarta en humo, se usa en hollín. Nos gusta el juego de palabras porque el hollín hace referencia a los restos que deja el humo. Con esta definición se puede terminar de entender la idea.