Durante el otoño y el invierno, la piel del pie puede resecarse, aprende cómo cuidarla.
¿Por qué es importante mantener hidratados y sanos los pies?
Una de las principales razones es evitar que se produzcan descamaciones o que los talones se lastimen por la sequedad excesiva de la piel.
¿Qué puede ayudar?
El frío hace que la circulación en los pies no sea del todo buena. Se recomienda realizar masajes o baños de agua tibia luego de estar muy expuestos al tiempo invernal.
Elige calcetines de fibras naturales. Estas calientan mejor al tiempo que permiten que el pie “respire”.
Evita exponerlos a fuentes directas de calor de estufas.
Utiliza para su higiene jabones hidratantes.
No abuses del talco o spray desodorante. Ponlos en la medida justa ya que sus componentes puede ayudar a que la piel se reseque.
Usa una crema hidratante a diario y elige aquellas con elementos naturales o Vitamina A y E. Aplica durante la noche para mejores resultados.