Hija de la horticultura, la floricultura es una disciplina dedicada al cultivo de flores y plantas ornamentales, es decir, con fines meramente decorativos. Esta ciencia engloba la producción y comercialización de plantas para jardín y flores de corte, así como actividades muy diversas, desde el paisajismo hasta la decoración de interiores.
Asimismo, los productos de la floricultura son innumerables debido a la industrialización de esta práctica. Con Holanda a la cabecera, la utilización de los cultivos se puede dividir en tres categorías:
Plantas de canteros: por ejemplo, petunias, violas, salvias y prímulas.
Plantas de flor cortada para adornos florales: por ejemplo, clavel, rosa, crotón y gladiolos.
Plantas con flor para macetas: por ejemplo, jazmín, geranio, orquídea y azalea.
Ahora bien, como es sabido, cada planta tiene su ciclo y son muy pocas las especies que duran todo el año. Por ello, a continuación te compartimos las 3 flores ideales para cada estación y tips para su cuidado:
Verano
Jazmines: si los capullos no se abren, es porque no está recibiendo suficiente luz. Muévelo a un lugar más iluminado, pero sin que el sol le pegue directamente.
Violetas: debes regarlas con agua tibia. Evita no hacerlo con agua fría, ya que le pueden salir manchas oscuras a sus hojas.
Magnolias: se desarrollan mejor en suelos profundos, frescos, húmedos y bajos en caliza. Vigila constantemente sus nutrientes, pues sino puede sufrir de clorosis.
Otoño
Pensamientos: es necesario plantarlos en tierra nueva para asegurar una provisión adecuada de nutrientes. Pasados los dos meses, riega el suelo con abono para plantas de flor.
Dalias: si deseas cortarlas para hacer un ramo o ponerlas en un jarrón, lo ideal es hacerlo a primera hora de la mañana o cuando anochezca. Cambia el agua cada 2 días.
Crisantemos: durante la noche, mantenlos alejados de luces artificiales. Son plantas de días cortos, por lo que necesitan un largo periodo de oscuridad para poder florecer.
Invierno
Margaritas: plántalas con una separación de entre 10 y 15 cm para que puedan ventilarse mejor y crecer adecuadamente. Necesitan un mínimo de 3 horas diarias de sol directo.
Orquídeas: Como sus floraciones son anuales y prolongadas, no dejes que las flores se marchiten en la planta. Córtalas cuando todavía están en buen estado.
Tulipanes: para que duren lo máximo posible, elige los que tengan las corolas aún ligeramente cerradas y que no hayan alcanzado su intensidad máxima de color.
Primavera
Narcisos: crecen mejor a la semi-sombra y no deben exponerse a temperaturas superiores a los 16°C ya que el exceso de calor los marchitaría y acortaría el período de floración.
Rosas: es recomendable regarlas 2 veces a la semana, con mucha agua para que llegue hasta la raíz. No riegues la hoja porque la humedad favorece la invasión de hongos.
Gardenias: plántalas en compañía de especies aromáticas, de esta forma lograrás repeler a los insectos que la atacan.
